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Ahora mismo Ethereum está en plena actualización. Arrow Glacer se llama, prevista en estos días, pero mucho menos contundente, al menos sobre el papel que el hardfork de Londres.
Y su objetivo está más que claro: ganar tiempo, en torno a unos meses, posiblemente dos, para trasladar la red a Ethereum 2.0 y retrasar lo que se conoce como "la bomba de dificultad", un código que podría dificultar la minería y la ralentización de la red de Ethereum. Todo ello para ese cambio esperado a la prueba de participación PoS, desde la actual prueba de trabajo PoW, necesario para la consecución de Ethereum 2.0.
A la espera de su consecución, lo cierto es que Ethereum, sigue con problemas que han afectado hasta la fecha a su cotización.Primero el efecto pernicioso de la variante ómicron de consecuencias inesperadas, sobre lo que se va arrojando luz y buenas vibraciones mientras las farmacéuticas como Pfizer constatan que una tercera dosis servirá para contrarrestar el impacto de la nueva y contagiosa variante del Covid-19.
Así las cosas, lo verdaderamente negativo para el valor ha venido de otra vertiente: un ciberataque con robo incluido.Hablamos del hackeo del poco a poco se va conociendo más detalles de la plataforma de intercambio BitMark, que parece haber concluido con uno de los mayores robos de criptomonedas desde que estas existen
Y además se da la circunstancia de que la mitad del mismo, de los 196 millones de dólares totales, unos 100 llegan directamente a Ethereum, afectado no solo como divisa digital sino afectando además a criptomonedas que circulan por su red de blockchain. Y tras la verificación, aunque primero no lo reconociera, de la compañía, sabemos que la abrupta y sorpresiva caída del sábado, con pérdidas que en el caso de Bitcoin superaron el 22% tuvo esta razón de fondo.
Tras la tempestad, un poco de calma a pesar del efecto.En las últimas cinco sesiones cotizadas Ethereum se mueve con pérdidas del 6,2% con un mes aciago en el que las caídas alcanzan el 5,90%. Pero es difícil empañar un año como el que está viviendo el activo en los mercados de criptomonedas. De ahí que, en los tres meses precedentes, el avance sea del 23,5% y en el año gane un 480,2%, mientras que, desde diciembre del pasado año, la revalorización alcance un 644%.
Como todos sabemos aquí entra en juego, entre otros, el peligro que conlleva la falta de regulación de estas divisas y sus circunstancias a nivel global.Unos robos, que suelen ser más comunes y menos conocidos de lo que creemos, una de las cosas a mejorar en el universo blockchain.
De momento Ethereum como vemos, se ve tocado, pero ni de lejos malogrado o hundido, ya que su capitalización como vemos en la gráfica sigue siendo la décimoquinta del mundo de los activos mundiales y supera el medio billón en el mercado.
Los indicadores premium de Estrategias de Inversión nos muestran que Ethereum, en modo consolidación y con rebaja de dos puntos y medio alcanza una puntuación total de 6,5 puntos de los 10 posibles para la criptomoneda. A la baja se mueve la tendencia a medio plazo, con un volumen de negocio decreciente a medio plazo y un rango de amplitud creciente a medio plazo también
En el otro lado, en el positivo, vemos como a largo plazo la tendencia de Ethereum se mueve alcista, con momento total, lento y rápido positivo, volumen de negocio a largo plazo creciente y la volatilidad del valor, en su rango de amplitud, se muestra decreciente a largo plazo.
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