- JPMorgan informa de una caída del 24% en el volumen de negociación de criptomonedas en enero, a pesar del aumento de la capitalización del mercado y del interés institucional.
- La correlación del bitcoin con los valores tecnológicos de pequeña capitalización del Russell 2000 se refuerza, lo que pone en entredicho su percepción como alternativa estable al oro.
El mercado de criptomonedas siempre ha sido impredecible, pero el comienzo de este año ha sido especialmente inusual. Según un reciente informe de JPMorgan, la capitalización del mercado de criptomonedas aumentó un 8% en enero de 2025, hasta superar los 3,4 billones de dólares, aunque la actividad comercial disminuyó. Con unos volúmenes de negociación diarios medios que disminuyeron un 24%, es posible que el mercado no sea tan activo como dan a entender las cifras de capitalización por sí solas.
Bitcoin y Altcoins: Entre el aumento y el descenso de la actividad
Con una capitalización que sigue aumentando, Bitcoin sigue siendo un actor importante. Aparte de Bitcoin, Solana y XRP también mostraron un aumento del valor de mercado bastante decente. Sin embargo, subyacente a este aumento, la actividad comercial en toda la industria de las criptomonedas en realidad ha disminuido.
Este fenómeno implica que en lugar de ser el resultado de un mayor compromiso por parte de los operadores activos, el aumento de los precios podría estar más impulsado por eventos externos, incluida la especulación.
No sólo eso, los sectores de las finanzas descentralizadas (DeFi) y los tokens no fungibles (NFT) también se han ralentizado. Varios proyectos DeFi que antes se negociaban ampliamente están experimentando ahora una disminución bastante significativa de la actividad. Esto plantea la pregunta: ¿están empezando a perder interés los inversores o simplemente están esperando mejores oportunidades?
Regulación y sentimiento del mercado: Una influencia que no puede ignorarse
Un factor que influye en esta dinámica son los cambios en la regulación. En Estados Unidos, la nueva Administración ha creado un grupo de trabajo especial para gestionar la regulación de las criptomonedas.
Una decisión que ha atraído bastante atención es la revocación de la norma contable SAB 121, que se ha considerado un obstáculo para la adopción institucional de activos digitales. Con este cambio, se espera que más empresas financieras tradicionales entren en el ecosistema de las criptomonedas.
Sin embargo, a muchos inversores les sigue molestando la incertidumbre regulatoria. Aunque se han tomado algunas medidas alentadoras, se desconoce cómo evolucionarán las leyes de los distintos países en los próximos meses. Algunos agentes del mercado han decidido ser más conservadores en este contexto.
Correlación del Bitcoin con los valores tecnológicos
Por otro lado, un informe anterior de CNF reveló que Bitcoin está más correlacionado con los valores tecnológicos de pequeña capitalización del índice Russell 2000 que con metales preciosos como el oro. Esta correlación parece ser cada vez más fuerte cuando el mercado experimenta picos y caídas.
En otras palabras, el movimiento de Bitcoin está imitando progresivamente la alta volatilidad de los valores tecnológicos de pequeña capitalización. Para los inversores que ven Bitcoin como un activo más consistente o similar al oro, esto es absolutamente digno de mención.
Este cambio también demuestra cómo, aunque se le denomine «oro digital», en realidad este activo suele fluctuar junto con valores de alto riesgo en lugar de activos refugio.
Dado el patrón actual, podrían ocurrir varias cosas. No es imposible que la actividad de negociación de criptomonedas vuelva a aumentar en los próximos meses si las leyes se vuelven más favorables y los flujos de dinero institucional siguen creciendo. Sin embargo, si la incertidumbre sigue reinando, el mercado puede seguir mostrando la misma tendencia: la capitalización del mercado aumenta, pero la actividad de negociación se mantiene lenta.