El ruso Sergey Berezin fue detenido en República Dominicana a mediados de este mes de abril, en el marco de una enorme operación internacional, liderada por la Justicia española y la Policía Nacional, contra la llamada estafa del cripto-cannabis, cuyo perjuicio está cifrado en unos 645 millones de euros.
Las autoridades de varios países consideran a Berezin el líder de dicha trama, orquestada en torno a las empresas del Grupo Juicy Fields. De hecho, este ciudadano ruso fue arrestado en dicho país caribeño a la vez que otras personas eran detenidas en España y en otros territorios europeos.
En el momento de su arresto, su identidad no trascendió. Pero EL ESPAÑOL ha podido confirmar que se trata de Sergey Berezin y que la Audiencia Nacional, que solicitó ayuda internacional para localizarle, está a la espera de que sea extraditado a nuestro país. El detenido también había usado la identidad de Paul Bergholts.
Fuentes de la Fiscalía dominicana relatan que los agentes incautaron a Berezin 922.800 pesos dominicanos, 33.310 dólares, 880 euros, 105 leu rumanos, 300 dírhams y 26.100 rublos en efectivo, así como varios cargadores para pistolas, con capacidad para 31 balas de 9 milímetros de calibre.
Un comunicado de la Procuraduría General de la República Dominicana también detalla que los agentes requisaron "múltiples pasaportes con información, presumiblemente, falsa" y una sustancia que podría ser marihuana. También le fueron incautadas varias criptomonedas, por valor de más de 55.900 dólares. Entre ellas, Bitcoin, USDT, TRX y Ethereum.
Audiencia Nacional
El juez Joaquín Gadea, magistrado de refuerzo del Juzgado Central de Instrucción número 6, investiga, precisamente, el llamado caso Juicy Fields tras haber admitido a trámite la querella interpuesta por decenas de afectados en nuestro país.
Pese a tener la nacionalidad rusa, el empresario se hospedaba en una villa en el país latinoamericano. Concretamente, en un complejo turístico en la paradisiaca localidad pesquera de Bayahíbe. Cuando los agentes que forman parte de la investigación conocieron este dato, esperaron a poder capturarlo en República Dominicana. Y así lo hicieron. Fue arrestado en la provincia de La Altagracia. A la vez, también se produjeron registros en viviendas de Alemania, Letonia, Estonia y Polonia.
Berezin sería —siempre según las autoridades de los países que conforman esta operación internacional— el líder de la supuesta estafa. Una reciente resolución de la Audiencia Nacional detalla el funcionamiento de la trama del cripto-cannabis. ¿Y cómo funcionaba? Los inversores se registraban en una web (juicyfields.io) einvertían en ella cantidades de dinero para la expansión de cultivos de esa planta, gestionados por socios comerciales (los llamados partners) de Juicy Fields y de cuyo crecimiento esperaban recibir el beneficio.
Los pagos se recibían mediantetres tipos de criptomonedas: Bitcoin, Ether y Theter. La publicidad de la Juicy Fields indicaba que estos partners contaban con las licencias necesarias para el cultivo de cannabis. Los beneficios que se prometían oscilaban entre el 70% y el 168,08%.
Las transferencias de los inversores eran recibidas en una cuenta bancaria en Chipre, titulada por las diversas entidades del grupo Juicy Fields. En el caso de los pagos con criptomonedas, su destino era unwallet(monedero virtual).
La de Juicy Fields no es la única vinculación de Berezin con una pintoresca estructura de inversiones. En el pasado, formó parte del proyecto Recyclix, puesto en marcha en 2015.
A través de esta plataforma, los inversores podrían comprar desechos plásticos, que luego se reciclarían para volver a reutilizarse y cobrar retornos por este proceso.