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Bitcoin continúa luchando por debajo de los niveles de resistencia clave mientras el mercado intenta estabilizarse después de una prolongada liquidación.
El activo permanece dentro de la zona de flujo de órdenes alcista más amplia, pero la tendencia general sigue siendo decididamente bajista; se requieren recuperaciones estructurales antes de que pueda desarrollarse una reversión significativa.
Análisis técnico
Por Shayan
El gráfico diario
Bitcoin ha retrocedido hacia la principal zona de flujo de órdenes alcista tras no lograr recuperar ninguna estructura de marco de tiempo superior. La cruz de la muerte (death-cross) entre los promedios móviles de 100 y 200 días ya se ha materializado, confirmando un cambio hacia un impulso bajista sostenido, siempre que el precio se mantenga por debajo de la región de $100.000–$104.000.
La última mecha hacia $80.000 muestra que se ha recogido la liquidez por debajo del mínimo macro anterior. Los compradores reaccionaron agresivamente en el límite inferior de la zona de acumulación verde, pero la recuperación sigue siendo correctiva. Mientras el mercado cotice por debajo del grupo de oferta de $92.000–$96.000, este rebote debe tratarse como un movimiento de alivio dentro de una tendencia bajista más amplia.
Si los compradores logran establecer estabilidad por encima del pivote de $96.000, se vuelve posible una nueva prueba de rango medio de $100.000–$104.000. Pero la incapacidad de recuperar esa área deja la puerta abierta a otra barrida más profunda hacia la banda de acumulación inferior entre $80.000 y $83.000.
El gráfico de 4 horas
La estructura a corto plazo sigue alineada a la baja, con el precio respetando la línea de tendencia descendente y cada rally deteniéndose en niveles de oferta más bajos. El retroceso más reciente se estancó precisamente en el pocket de Fibonacci de 0,5–0,618, lo que subraya la compresión contra la línea de tendencia.
Hasta que la línea de tendencia descendente se recupere claramente, el potencial alcista sigue siendo limitado. Una ruptura confirmada por encima de $90.000–$92.000 indicaría que el impulso está rotando hacia arriba, abriendo un camino hacia la zona de ineficiencia de $96.000–$98.000. Sin embargo, un rechazo desde la línea de tendencia actual probablemente enviaría al activo de vuelta al rango de soporte de $83.000–$86.000, donde se encuentra el próximo grupo de volatilidad.
Análisis en cadena
Por Shayan
El CDD binario de Bitcoin revela un notable cambio de comportamiento entre los tenedores a largo plazo o de «dinero inteligente». Los tres picos ascendentes marcados en el gráfico se alinean claramente con los máximos del ciclo, lo que sugiere que los tenedores experimentados optaron por deshacerse discretamente de BTC ante la fortaleza, mientras la participación minorista se aceleraba. Cada pico coincidió con un máximo local o macro, confirmando que la oferta latente se estaba reactivando a precios premium.
Este patrón indica que la toma de ganancias por parte de los tenedores a largo plazo comenzó mucho antes de la liquidación del mercado, un sello clásico de las fases de distribución.
Al mismo tiempo, los tenedores a corto plazo han estado capitulando agresivamente. Las métricas SOPR muestran que los tenedores a corto plazo (STH, por sus siglas en inglés) han pasado semanas vendiendo con pérdidas, produciendo una profunda banda de capitulación por debajo de 1,0. Esta combinación (distribución de dinero inteligente en la parte superior y venta reactiva en la parte inferior) generalmente marca las etapas finales de una corrección, no las iniciales.
Aunque esto no implica una reversión inmediata, la limpieza de las manos débiles y la absorción observada alrededor de la zona de acumulación inferior sugieren que el mercado está en transición hacia una posible fase de acumulación. La defensa sostenida del área de demanda realizada de $80.000–$83.000 reforzaría este escenario. Sin embargo, una ruptura limpia por debajo de esa región indicaría que la liquidación final aún no ha terminado.
