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Bitcoin comienza la semana con la mirada fija en dos frentes: la estructura técnica que amenaza con un movimiento de ruptura, y un escenario global cargado de definiciones, con el FMI celebrando su reunión de primavera entre el lunes 21 y el viernes 25 de abril.
En un entorno donde las decisiones de los grandes jugadores y los discursos de los reguladores se entrecruzan, la reina de las criptomonedas se encuentra en una encrucijada que podría marcar el rumbo de los próximos días.
Análisis Técnico (velas de 4H)
Durante los últimos siete días, Bitcoin ha oscilado entre los 83.100 USD como soporte clave y los 86.400 USD como resistencia inmediata, delimitando una franja de consolidación que mantiene al mercado en vilo.
Lectura técnica destacada:
- El RSI en velas de 4H se mantiene en zona neutral (cerca de 50), reflejando equilibrio entre compradores y vendedores.
- La media móvil exponencial de 20 periodos actúa como eje dinámico de soporte/resistencia, con cruces frecuentes en los últimos días.
- El volumen muestra una leve caída, típica en escenarios de acumulación lateral antes de un movimiento significativo.
Una ruptura sólida por encima de los 86.400 USD podría habilitar un nuevo ataque a la zona de 88.000–89.000 USD, mientras que una pérdida clara de los 83.100 USD abriría paso a una corrección hacia los 81.500 USD, y luego posiblemente a los 78.000 USD como piso más amplio.
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Claves fundamentales: El FMI y la narrativa macro
Esta semana, todos los ojos están puestos en Washington, donde el Fondo Monetario Internacional (FMI) desarrolla su tradicional Reunión de Primavera. Aunque el foco principal serán las economías emergentes, las criptomonedas y sus implicancias en los flujos globales no estarán fuera de discusión.
En particular, el mercado especula con posibles referencias a:
- Riesgos financieros de los activos digitales en economías en desarrollo.
- La necesidad de marcos regulatorios comunes.
- Presiones sobre monedas fiat en crisis, donde BTC sigue posicionándose como refugio alternativo.
Estas menciones, si son negativas, podrían frenar momentáneamente la narrativa alcista; si son neutras o favorables, podrían actuar como catalizador para una ruptura al alza.
Conclusión
Bitcoin se enfrenta a una semana crucial, donde la convergencia entre análisis técnico y tensiones institucionales puede definir su próximo gran movimiento. Mientras tanto, el inversor atento observa -como quien mide el pulso de una tormenta inminente- si la calma que reina en las gráficas no es más que el preludio del próximo rugido.