Bitcoin (BTC) superó los 107.000 dólares logrando un nuevo máximo histórico que impulsó la ganancia acumulada desde las elecciones estadounidenses a más del 50%.
La promesa del presidente electo de Estados Unidos Donald Trump de crear una reserva estratégica de bitcoin ha respaldado el reciente repunte de la moneda. Aun así, los traders de opciones muestran una perspectiva cautelosa sobre el futuro inmediato del activo digital.
Datos del mercado de derivados reflejan que los operadores no buscan un repunte significativo en el corto plazo.
Los precios actuales de las opciones negociadas en Deribit muestran que los inversionistas pagan primas más altas por las opciones de venta (put) que por las opciones de compra (call), lo que indica una preferencia por protegerse ante caídas.
La reversión de riesgo de 25 delta para las opciones con vencimiento este viernes resultó negativa. Esto significa que las opciones de venta con delta 25, que aumenta 25 centavos por cada dólar que sube el activo, se negocian con una mayor demanda.
Una reversión de riesgo negativa refleja aversión al riesgo, pues los inversionistas anticipan una mayor probabilidad de caídas antes del vencimiento.
Las opciones de venta que vencen el 27 de diciembre también registraron una ligera prima respecto de las opciones de compra. Este dato sugiere que los traders prefieren mantenerse cubiertos en el corto plazo.
Jeff Mei, director de operaciones del exchange BTSE, indicó que bitcoin podría alcanzar los 125.000 dólares para finales de 2025, tal como lo reportó CriptoNoticias.
Sin embargo, los movimientos recientes en el mercado de opciones evidencian que los traders no persiguen el alza con el mismo énfasis que en ocasiones anteriores. El sentimiento de cautela podría deberse a las preocupaciones de que el miércoles la Reserva Federal (Fed) no eleve las tasas de interés tal como se espera.
La codicia llega al extremo
Por su parte, el índice de miedo y codicia del mercado se ubica en 87 puntos, lo que representa un estado de codicia extrema.
En momentos como este, los inversionistas tienden a realizar compras impulsivas debido al FOMO (miedo a perderse una oportunidad). Esto puede exagerar las expectativas alcistas. Al disiparse el entusiasmo, suelen ocurrir tomas de ganancias que generan presión bajista sobre el precio de bitcoin.
Aunque la codicia extrema suele anticipar una corrección, esta no es una regla absoluta. El mercado puede mantenerse en un estado de codicia durante semanas, especialmente en ciclos de «bull run».
El comportamiento actual del mercado de opciones contrasta con el avance de bitcoin hacia nuevos máximos. Mientras los traders buscan protegerse, los precios continúan subiendo. La divergencia entre la actividad en el mercado de derivados y el sentimiento general refleja una mayor cautela entre los inversionistas institucionales.
Este avance de bitcoin se relaciona con expectativas de adopción institucional y promesas políticas favorables. La reserva estratégica anunciada por Trump representa un posible catalizador para la adopción a largo plazo. Sin embargo, en el corto plazo, el mercado de opciones sugiere que los traders prefieren reducir riesgos y asegurar posiciones.
Por lo pronto, bitcoin permanece en la atención del mercado. A pesar de las señales cautelosas, el activo digital sigue marcando máximos y generando expectativas para 2025.