El crecimiento de la adopción de criptomonedas en Honduras ha sido notable en 2023, con el país alcanzando un total de 241,679 personas que poseen criptomonedas, según datos de Triple-A.
Este incremento, que representa un 40% más que en 2022, muestra un interés creciente de los hondureños en activos digitales, especialmente en bitcóin (BTC), cuyo reciente repunte de precios ha sido clave en esta expansión. Sin embargo, la influencia de BTC en Honduras va más allá de las finanzas personales. Estos números muestran una transformación que está teniendo repercusiones en el marco económico y legal del país.
Bitcoin en Honduras: miles obtienen ganancias pese a no ser una “nación de BTC”
Más de 200,000 hondureños habrían experimentado ganancias sustanciales en sus inversiones en criptomonedas, impulsadas por el repunte del precio de Bitcoin. Dependiendo de los movimientos estratégicos que estos hayan hecho, las ganancias irían desde el 8%-10%, hasta más del 20% para los holders más experimentados.
Con el aumento de BTC, estos inversores han visto crecer el valor de sus activos, destacando el atractivo de las criptomonedas como una vía de inversión alternativa en el país. Esta ganancia no solo ha representado un beneficio económico para los inversores individuales, sino que también ha generado un interés creciente en el mercado cripto hondureño. Mismo que podría continuar expandiéndose a medida que las criptomonedas consoliden su presencia en la región.
Por otra parte, Honduras no ha sido el país único beneficiado; su vecino centroamericano, El Salvador ha experimentado un rendimiento positivo en sus bonos, con un reciente aumento del 4,7% en sus valores. Un escenario que coloca a la deuda salvadoreña entre las de mejor desempeño en los mercados emergentes, solo superada por Ucrania.
Estas ganancias, impulsadas en parte por el incremento del precio de BTC, han mejorado la posición financiera del país, permitiendo una mayor estabilidad y atracción de inversión extranjera.
En el caso de El Salvador, se estima que el 10% de la población cuenta ya con alguna posesión (por mínima que sea) de criptomonedas. Sin embargo los beneficios de la subida del precio de BTC se comprenderán mejor desde un punto de vista macroeconómico.
Ganancias con Bitcoin se disparan en Honduras pese a conflicto en Ciudad de Próspera
La principal diferencia entre los beneficios de Honduras y El Salvador radica en que la ciudadanía hondureña los ha percibido de forma más directa e inmediata. Pese a los conflictos legales en el país, se estima que al menos 241,679 personas en Honduras poseen criptomonedas.
Pese a este optimismo, el 20 de septiembre, la CSJ declaró inconstitucionales los decretos 236-2012 y 120-2013. Los cuales daban sustento a las ZEDE. En su fallo, la Corte Suprema determinó que las ZEDE vulneraban artículos fundamentales de la Constitución hondureña. Poniendo además en peligro la continuidad de Próspera como un “espacio de experimentación económica y adopción de criptomonedas”. Esta resolución genera un entorno de incertidumbre para los inversores y residentes que habían puesto sus expectativas en el potencial de la Ciudad Bitcoin.
La disolución de las ZEDE en Honduras no solo limita la expansión de proyectos cripto como Próspera, sino que también envía una señal de cautela a los inversores extranjeros interesados en el país.
Pese a ello el ecosistema de criptomonedas en América Central sigue evolucionando. Y es aquí donde el caso hondureño muestra cómo el interés de los ciudadanos puede mantenerse incluso frente a desafíos regulatorios.