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Señales: bitcoin está dando nuevas oportunidades de compra

source-logo  criptonoticias.com 03 Junio 2024 12:06, UTC

Bitcoin (BTC), la moneda digital creada por Satoshi Nakamoto, ha caído en una zona de lateralización que pareciera no tener fin y ya está aburriendo a algunos inversionistas.

El pasado 14 de marzo, BTC marcó un nuevo máximo histórico alrededor de los 70.700 dólares (puede ser un poco más o menos, según el exchange donde se mire el precio) y luego comenzó a oscilar hacia arriba y abajo de una directriz en torno a los 66.000 dólares, aproximadamente.

En el siguiente gráfico, provisto por TradingView, se observan los movimientos a los que aquí se hace referencia:

Muchos inversionistas habían pensado que recientes datos macroeconómicos —específicamente el índice de inflación PCE de los Estados Unidos que se dio a conocer el viernes— serían beneficiosos inmediatamente para el precio del criptoactivo. Pero, si bien provocaron alguna volatilidad momentánea, esta no termino por definirse (al menos, hasta el momento) en una marcada tendencia alcista.

Bitcoin todavía tiene «combustible» para seguir subiendo

En este contexto, puede ser de utilidad para cualquier inversionista o hodler de bitcoin que piense en el mediano y largo plazo (no entran aquí scalpers ni day traders) volver al análisis fundamental de bitcoin.

Es que la moneda digital todavía mantiene con plena vigencia los factores fundamentales alcistas que podrían hacer que su subida de precio continúe en lo que resta de 2024 y, probablemente, en parte de 2025.

ETF de bitcoin aprobados

2024 marcó un hito importante para el ecosistema de bitcoin con la aprobación de los ETF de BTC al contado en Estados Unidos. Esto ocurrió en enero.

Los ETF al contado, diseñados para permitir una exposición bitcoin a través de un instrumento regulado (como si se tratara de una acción bursátil), fueron recibidos con entusiasmo por la comunidad inversionista.

La aceptación y el éxito inicial de estos productos sugieren una continua atracción para una gama más amplia de capitales, especialmente corporativos e institucionales, que buscan operar con instrumentos supervisados por la Comisión de Bolsa y Valores (SEC).

CriptoNoticias ya ha reportado la llegada de numerosas empresas multimillonarias a los ETF de bitcoin. Entre ellas se encuentran reconocidos bancos de la talla de JP Morgan, Morgan Stanley o Wells Fargo. Resulta curioso que los tradicionales enemigos de bitcoin (los bancos) ahora acaparen bitcoin, aunque sea de manera indirecta mediante fondos de inversión.

Para poner esto en perspectiva, podemos comparar esta situación con el lanzamiento de los ETF del oro en 2004. Desde entonces, los ETF de oro han jugado un papel fundamental en la facilitación de la inversión en el metal precioso, atrayendo enormes flujos de capital.

En el siguiente gráfico, provisto por TradingView, se observa el precio de la acción del fondo de inversión SPDR Gold Trust desde su lanzamiento en 2004. Cada vela (barra roja o verde) representa un mes:

De manera similar, los ETF de bitcoin al contado facilitan la inversión en esta moneda digital. Además, si tienen una gran adopción será alcista para bitcoin, ya que las empresas gestoras de estos fondos de inversión están obligadas a comprar BTC para respaldarlos. Esto, por simple ley de oferta y demanda, hace que su precio se incremente.

El «efecto halving» se hará sentir

El reciente halving de Bitcoin, acontecido el pasado 20 de abril, es otro factor fundamental que respalda su potencial alcista. Históricamente, el precio de BTC ha mostrado un incremento parabólico aproximadamente seis meses después de cada halving.

Este evento, que reduce a la mitad la recompensa por bloque minado, disminuye la tasa de emisión de nuevos BTC, lo cual crea una escasez relativa si la demanda se mantiene o aumenta.

La lógica detrás de este fenómeno es simple: con una oferta disminuida y una demanda constante o creciente, el precio tiende a subir. Este patrón ha sido observado después de cada uno de los halvings anteriores, y hay elevadas probabilidades de que el ciclo se repita. Así, el halving de 2024 podría ser el catalizador para un nuevo y masivo ‘bull run’, quizás, llegando al último trimestre del año.

El siguiente es un gráfico histórico del precio de bitcoin. Cada línea amarilla es la fecha en la que se produjo un evento de reducción a la mitad de la emisión (halving). Cada barra roja o verde representa un mes:

En la imagen anterior resulta evidente como bitcoin se ha disparado al alza unos 6 meses después de cada halving. Pero… ¿notas alguna «anomalía reciente»? Tómate un segundo para mirar de nuevo el gráfico antes de seguir leyendo.

Por primera vez en la historia, la «disparada» de bitcoin que lo llevó a nuevos máximos históricos se produjo antes del halving y no después. Probablemente la llegada de los ETF al contado en Estados Unidos haya tenido gran influencia en esto.

Entonces, si la historia se repite y BTC vuelve a ir a nuevos máximos históricos, pero desde este punto de partida, podría darse lo que muchos han denominado un «súper ciclo alcista».

Así lo expresó el comunicador Manuel Terrones Godoy (también conocido como KmanuS) quien, incluso, se atrevió a hacer una proyección de hasta qué precio podría llegar bitcoin en este ciclo alcista, en su opinión:

«Me piden que tire valores y me la voy a jugar: en este ciclo me imagino un bitcoin en 500.000 dólares y un Ethereum entre 10.000 y 15.000 dólares. ¿Va a pasar? Yo espero eso, quizás suba más o quizás suba menos. No tengo idea. Pero que sube, sube. Porque bitcoin es demasiado bueno una vez que lo entendés. Y te resuelve el problema del principio, el problema de la Banca Central. Es algo que hoy, aparte de ser superador, tiene el camino libre. Antes teníamos al mundo en contra. Pero hoy el mundo está empujando a favor. Hoy venimos con viento a favor. ¿Entienden a dónde va el punto? ¿Por qué digo que es un súper ciclo? Porque es el ciclo en el que empieza a crecer la adopción».

Manuel Terrones Godoy, influencer de criptomonedas y gaming.

El influencer está convencido de que «el proceso ya empezó» y quienes no estén activos ahora se van a perder la posibilidad de tomar beneficios de esta subida de precios.

Factores macroeconómicos impulsarán a bitcoin

Las expectativas de inflación decreciente en los Estados Unidos, la principal potencia mundial, son un factor macroeconómico clave que podría beneficiar a bitcoin.

Cuando la inflación disminuye, los inversionistas anticipan posibles reducciones en las tasas de interés. En un entorno de tasas más bajas, los activos de mayor riesgo (como las criptomonedas y las acciones bursátiles) tienden a ser más atractivos, ya que el mercado buscan mayores rendimientos. Bitcoin, conocido por su volatilidad pero también por su potencial de alto rendimiento, se convierte en una de las opciones preferidas.

Pero, aunque la inflación del dólar vaya a disminuir (de acuerdo con las promesas de políticos y las predicciones de algunos economistas), lo cierto es que la moneda estadounidense (al igual que todo el dinero fíat del mundo) está en un proceso de constante devaluación, a causa de su emisión ilimitada y mayormente inorgánica.

En la siguiente imagen puede verse cómo ha caído el poder de compra del dólar estadounidense en el último siglo:

Aquí es donde bitcoin vuelve a destacarse. Bitcoin es fundamentalmente diferente al dólar estadounidense y a cualquier otra moneda fíat en varios aspectos clave que resaltan sus características únicas y su potencial como dinero fuerte.

A diferencia del dinero fíat que puede ser emitido sin límite por los bancos centrales, bitcoin tiene un suministro máximo fijo de 21 millones de unidades. La escasez inherente de BTC es una de sus virtudes más apreciadas.

La política económica de BTC es predefinida y programada en su código fuente. Esto incluye la tasa de emisión de nuevos bitcoins, la periodicidad de los halvings y el suministro máximo. A diferencia de las monedas fíat, cuya política monetaria puede ser modificada por decisiones de los bancos centrales o gobiernos, la política económica de Bitcoin no puede ser alterada sin el consenso de la red. Esto proporciona una previsibilidad y transparencia que es difícil (por no decir imposible) de encontrar en los sistemas monetarios tradicionales.

Aun así, los Bancos Centrales del mundo (salvo contadas excepciones, como el de El Salvador) suelen ser férreos opositores a la idea de una moneda digital descentralizada, privada y con un circulante limitado como es bitcoin. ¿Tendrán miedo de que la estafa del dinero fíat quede expuesta?

Por si todo esto fuera poco, Bitcoin es una red descentralizada de computadoras (nodos) distribuidas por todo el mundo. No hay una entidad central que controle Bitcoin, lo que lo hace resistente a la censura y la manipulación.

Las transacciones en la red son verificadas por los nodos y registradas en un archivo de contabilidad (blockchain) público e inmutable. Esta descentralización contrasta fuertemente con las monedas fíat, que son emitidas y controladas por entidades centralizadas y corrompibles.

El desarrollo tecnológico en Bitcoin no se detiene

Cada tanto, los promotores de shitcoins suelen argumentar que, como Satoshi Nakamoto desapareció luego de crear Bitcoin, el desarrollo tecnológico en esta red es inexistente.

¡Nada más alejado de la realidad! Es cierto que Bitcoin no tiene una «fundación» o una empresa que esté trabajando en su código (a diferencia de lo que ocurre con varias criptomonedas, por ejempo, Ethereum), pero esto no significa que no haya desarrolladores dedicados a hacer de Bitcoin una mejor herramienta día a día.

Prueba de esto son los avances tecnológicos recientes que están expandiendo sus usos más allá de ser solo una red para transacciones monetarias. Desarrollos como Ordinals, Runes y los tokens BRC-20 están expandiendo las capacidades en la red Bitcoin, incluyendo la creación de NFT, DeFi y dApps.

Si estos desarrollos continúan y se fortalecen, podríamos ver a Bitcoin compitiendo realmente con redes como Ethereum, Solana y otras especializadas en contratos inteligentes. La capacidad de Bitcoin para soportar una industria robusta de NFT, DeFi y aplicaciones descentralizadas podría atraer a una nueva ola de usuarios y desarrolladores, aumentando aún más la demanda, el valor y el precio de la moneda digital.

Cada caída o lateralización de bitcoin es una oportunidad de compra

En el mundo de las inversiones, la volatilidad y los movimientos de precios laterales a menudo son vistos como señales de alarma. Sin embargo, cuando se trata de BTC, cada caída o periodo de lateralización puede ser visto como una oportunidad de compra.

La razón es simple y debería haber quedado clara para quien haya llegado hasta aquí con la lectura. Los fundamentos subyacentes de bitcoin siguen siendo sólidos y las perspectivas a largo plazo son alcistas.

Por lo tanto, en lugar de intentar predecir los máximos y mínimos del mercado, los inversionistas pueden beneficiarse significativamente adoptando una estrategia de compra constante y sistemática, conocida como DCA (Dollar-Cost Averaging).

La estrategia de DCA implica invertir una cantidad fija de dinero en BTC a intervalos regulares, independientemente del precio actual. Por ejemplo, un inversionista podría decidir comprar 100 dólares en bitcoin cada semana o cada mes.

El DCA fomenta una disciplina de inversión constante y sistemática. Al comprometerse a invertir regularmente, se construye una posición en bitcoin no influenciada por las emociones del mercado a corto plazo.

Históricamente, BTC ha mostrado una tendencia alcista a largo plazo a pesar de su volatilidad a corto plazo. Por lo tanto, al utilizar el DCA los inversionistas están posicionados para beneficiarse del crecimiento a largo plazo del activo digital.

¿A qué precio podría llegar bitcoin en este ciclo alcista?

Si bien el futuro es incierto e impredecible con certeza, algunos analistas y traders se han animado a especular a qué precios podría llegar bitcoin en este ciclo alcista.

En marzo, luego de que bitcoin marcara su precio máximo histórico, CriptoNoticias reportó algunas de estas estimaciones. El banco multinacional Standard Chartered, por ejemplo, después de analizar el comportamiento reciente del precio del activo digital y la influencia de los fondos cotizados en Estados Unidos, ajustó al alza su proyección. Ahora, los analistas de esta institución financiera estiman que BTC alcanzará los 150.000 dólares para finales de 2024 y los 250.000 dólares en 2025. Esta revisión se debe, principalmente, a la fuerte demanda de los ETF.

El conocido inversionista y autor Robert Kiyosaki predice que bitcoin llegará a los 300.000 dólares para finales de 2024. Kiyosaki basa su predicción en el halving y extrapolaciones de patrones históricos. Según Kiyosaki, la escasez programada de bitcoin, combinada con su visión de que las monedas fiat como el dólar perderán valor con el tiempo, justifica su optimismo.

El analista técnico y trader veterano Peter Brandt piensa que bitcoin llegará a 200.000 dólares en el actual ciclo alcista, que espera se extienda hasta septiembre de 2025. Brandt fundamenta su predicción en el análisis técnico, señalando que el precio de BTC ha superado un canal ascendente de máximos y mínimos que ha mantenido durante los últimos 15 meses, lo que indica una tendencia alcista fuerte y prolongada.

Por último, la empresa de gestión de activos Ark Invest también ha manifestado un gran optimismo sobre el precio de BTC. En un informe publicado en marzo sugerían que si los inversionistas institucionales asignaran entre el 1% y el 4,8% de sus carteras a bitcoin, su precio podría subir a una cifra entre los 120.000 y 550.000 dólares. Más aún, si estos inversionistas dedicaran un 19,4% de sus carteras, el precio de bitcoin podría alcanzar hasta 2,3 millones de dólares. Esta proyección se apoya principalmente en la reciente aprobación de los ETF de Bitcoin en Estados Unidos.


Descargo de responsabilidad: Los puntos de vista y opiniones expresadas en este artículo pertenecen a su autor y no necesariamente reflejan aquellas de CriptoNoticias. La opinión del autor es a título informativo y en ninguna circunstancia constituye una recomendación de inversión ni asesoría financiera.

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