Hoy te voy a hablar de los ETFs de Bitcoin, esos fondos que cotizan en bolsa y que nos permiten invertir en BTC sin complicarnos la vida. ¿Qué tienen de bueno? Pues que nos dan la oportunidad de participar en el mercado de Bitcoin sin tener que comprarlo directamente ni guardarlos en una billetera digital. Lo que no es, para muchos, necesariamente, malo. Es como si compráramos acciones de una empresa que tiene bitcoins, pero sin tener que preocuparnos por las claves privadas o los hackers.
Pero, claro, no todo es felicidad. Para que exista un ETF de Bitcoin al contado, tiene que ser aprobado por la SEC, la entidad que regula los mercados financieros en EE.UU. Y la SEC, al parecer, no le tiene mucha confianza a Bitcoin, porque piensa que es un mercado muy volátil y manipulable. Por eso lleva años rechazando las solicitudes de ETF de Bitcoin al contado.
¿Y cuántas solicitudes hay esperando aprobación? Pues bastantes, y cada vez más. En este momento, podría haber al menos 12 solicitudes de ETF de Bitcoin al contado y 7 solicitudes de ETF de Bitcoin basados en futuros. La SEC parece más abierta a aprobar estos ETF, porque cree que son más regulados y transparentes.
¿Y cuáles son las mejores opciones? Pues depende de lo que busques. Si quieres un ETF de Bitcoin al contado, quizás te guste el de BlackRock, el gestor de activos más grande del mundo, que ha presentado una solicitud con Coinbase y BNY Mellon como custodios. O el de WisdomTree, que ha vuelto a intentarlo después de que la SEC le dijera que no. O el de Galaxy Digital e Invesco, que han unido fuerzas para crear un ETF de Bitcoin respaldado físicamente.
Si prefieres un ETF de Bitcoin basado en futuros, tal vez te interese el de ProShares, que fue el primero en salir a la Bolsa de Nueva York. O el de Valkyrie, cuyo ETF podría cotizar bajo el símbolo BTFD (Buy The F***ing Dip). O el de Grayscale, el mayor fondo del mundo que invierte directamente en bitcoin, que ha solicitado convertirse en ETF.
¿Serán aprobados todos? ¿Serán rechazados todos? ¿Cuáles sí y cuáles no? Eso solo lo sabe la SEC, y no creo que nos lo diga hasta el final. Así que solo nos queda esperar y confiar en que algún día podamos ver un ETF de Bitcoin al contado en EE.UU. Mientras tanto, podemos seguir comprando y holdeando nuestros queridos bitcoins, o usar otros servicios financieros como los ETF canadienses o brasileños, o los ETC suecos o alemanes. O simplemente disfrutar del viaje.
¿Y por qué puede ser mejor comprar un ETF de Bitcoin que Bitcoin (para algunas personas)? Pues por varias razones:
La primera es que te ahorras las complicaciones de tener que abrir una cuenta en un exchange de criptomonedas, donde tienes que verificar tu identidad, depositar dinero y aprender a usar la plataforma.
La segunda es que te evitas los riesgos de perder tus bitcoins por un hackeo, un error o un olvido de tu contraseña o clave privada.
La tercera es que puedes invertir en Bitcoin desde tu cuenta de broker habitual, donde ya tienes otras acciones o fondos.
Y la cuarta es que puedes aprovechar las ventajas fiscales de los planes de jubilación como los IRA o los 401(k), donde puedes meter tus ETF de Bitcoin y verlos crecer con el tiempo.
¿Qué buscar en un ETF de Bitcoin? No todos los ETFs son iguales, ni todos te convienen. ¿Quién es el emisor del ETF? ¿Qué experiencia y reputación tiene? ¿Qué comisión anual cobra el ETF? ¿Qué gastos o impuestos puede tener? Recuerda que los costes reducen tu rentabilidad, así que busca el ETF más barato y eficiente posible.
¿Qué volumen de negociación tiene el ETF? ¿Qué diferencia hay entre el precio de compra y el de venta (spread)? ¿Qué diferencia hay entre el precio del ETF y el valor del activo (tracking difference)? Estos factores afectan a la facilidad y al precio al que puedes comprar o vender el ETF, así que busca el ETF más líquido y ajustado posible.
Recuerda: el rendimiento pasado no garantiza el rendimiento futuro.
Ahora bien, poseer un ETF de Bitcoin puede ser más caro que comprar simplemente Bitcoin en una plataforma de criptomonedas. Esto se debe a que las plataformas de criptomonedas suelen cobrar unas tarifas únicas para comprar y vender Bitcoin, mientras que poseer un ETF de Bitcoin implica una tarifa anual de ratio de gastos. Ten en cuenta los gastos que te cobran por este servicio. No vaya a ser que el ETF te salga más caro que Bitcoin. Hay que buscar uno barato de un emisor reconocido.
Algunos inversores pueden sentirse más seguros al obtener exposición al Bitcoin en sus carteras comprando un ETF gestionado profesionalmente que poseyendo BTC real. Todos tienen sus preferencias. No es el fin del mundo. Hay que respetar los deseos de los demás. ¿Eso va en contra del sueño de Satoshi? Puede ser. Pero así es el libre mercado. El usuario elige lo que mejor le conviene.
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Si eres de los que prefieren tener el control total de tus bitcoins, quizás los ETF de Bitcoin no sean para ti. Y no pasa nada. Los ETF de Bitcoin son para los que no quieren tener BTC en su custodia. Y prefieren utilizar estos instrumentos por diversas razones que ellos conocen muy bien. Eso es el libre mercado, el usuario elige su camino en libertad.
En resumen, los ETF de Bitcoin son una forma alternativa de invertir en la criptomoneda sin tener que lidiar con sus inconvenientes. Pero no son perfectos ni replican exactamente el rendimiento del mercado subyacente. Por eso, antes de invertir en un ETF de Bitcoin, es importante informarse bien y consultar a un asesor financiero. Y recuerda: nunca inviertas más de lo que puedas permitirte perder. Bitcoin es un activo muy nuevo y volátil, y nadie sabe qué le depara el futuro.
Aclaración: La información y/u opiniones emitidas en este artículo no representan necesariamente los puntos de vista o la línea editorial de Cointelegraph. La información aquí expuesta no debe ser tomada como consejo financiero o recomendación de inversión. Toda inversión y movimiento comercial implican riesgos y es responsabilidad de cada persona hacer su debida investigación antes de tomar una decisión de inversión.