Desde hace tiempo nos prometen esta nave XRP. ¿Victoria contra la SEC? Hecho. ¿Colaboraciones? Múltiples. ¿ETF? Lanzados. Y sin embargo, la cripto de Ripple lucha por despegar de manera duradera. Lo que debía ser un espectáculo de fuegos artificiales parece más bien una mecha mojada. Detrás de los bonitos anuncios, el mercado habla otro idioma: el del desapego. Y cuanto más pasan los días, más el sueño de un «XRP to the moon» parece una broma entre traders nostálgicos.
- XRP sube a 1,87 dólares pero su volumen cae bruscamente un 37 % en 24 horas.
- El RSI y el Open Interest envían señales preocupantes para la salud del mercado XRP.
- Los 1,80 dólares se convierten en una zona de tensión crítica, susceptible de acelerar una fuerte reversión.
XRP sube, pero sin testigos: cuando el mercado aplaude en silencio
En los gráficos, XRP intenta un último aliento. Entre el 26 y el 28 de diciembre, su precio sube hasta 1,87 dólares, con un soporte en 1,86 dólares. Se podría pensar en una recuperación. Pero detrás de esta subida se oculta una realidad menos halagüeña: el volumen de transacciones cayó un 37 % en solo 24 horas. ¿Un detalle? No realmente. Porque en la esfera cripto, el volumen es el termómetro de la convicción.
Durante los períodos festivos, los mercados se ralentizan, es cierto. Pero la historia muestra que algunos activos aprovechan los huecos de liquidez para sorprender. No es el caso de XRP. El ascenso de los metales preciosos no fue suficiente para galvanizar a la comunidad cripto, mucho menos a los traders de Ripple.
Esta caída en el volumen podría traicionar un creciente desinterés o un cansancio estratégico. Y cuando la acción es discreta, suele ser porque los capitales han huido. Lejos. Hacia proyectos percibidos como más dinámicos. ¿La paradoja? XRP sube… pero solo. En una sala vacía, los aplausos no resuenan.
Bajo la superficie, las señales técnicas se vuelven rojas
Más allá de las velas alcistas, los indicadores envían un mensaje completamente distinto. El RSI, por ejemplo, muestra una divergencia bajista marcada. En claro: el precio sube, pero el impulso se debilita. No hace falta ser un experto para entender que este desequilibrio suele anunciar un giro brutal.
Además, se suma otro indicador preocupante: el Open Interest en Binance, bajado a 450 millones de dólares. Un mínimo desde noviembre de 2024. Esta cifra refleja la cantidad de contratos derivados aún abiertos. ¿Una caída de esta magnitud? Traduce un desapego masivo de traders con apalancamiento. No es una estrategia. Es una fuga.
Otro punto crítico: el nivel de 1,80 $, ahora zona de tensión. El cruce a la baja de este umbral simbólico podría desencadenar una cascada de ventas automáticas, reforzando el escenario bajista. Una verdadera prueba de resistencia para Ripple.
¿Y en el resto del ecosistema cripto? No mejor. Bitcoin juega a saltar por debajo de los 90,000 $, incapaz de decidir. ¿La temporada altcoin? En pausa. Y los inversores, mirando hacia el horizonte, con el dedo en el botón «exit».
Industria cripto: del sueño narrativo a la disciplina de los fundamentales
Las promesas ya no bastan. En el universo cripto, la hype no reemplaza los usos. Coinbase lo ha resumido bien: entramos en una fase donde la actividad real pesará más que las historias de marketing. Y en esta nueva ecuación, proyectos como Ripple deberán demostrar algo más que comunicados de prensa y anuncios de ETF.
El año 2025 había comenzado bien para XRP. Cierre de la disputa con la SEC, adquisiciones estratégicas, lanzamientos de productos. Incluso las inteligencias artificiales – ChatGPT, Grok, Perplexity – hicieron sus predicciones. Pero con el paso de los meses, el impulso se diluyó. Los soportes técnicos ceden uno a uno. El optimismo se desgasta.
Y esto no es específico de XRP. Otras criptos, aunque robustas, también luchan por unir masas. La volatilidad de fin de año actúa como revelador de confianza. O de su ausencia.
Puntos clave numéricos para recordar sobre XRP y la coyuntura actual
- El precio de XRP se negocia a 1,91 $ al momento de la redacción;
- El volumen cayó un 37 % en 24 horas, alcanzando 1,06 mil millones de $;
- El RSI muestra una divergencia bajista en el gráfico semanal;
- El Open Interest de Binance alcanza un mínimo de 450 millones $;
- El umbral de 1,80 $ se considera una zona pivote psicológica.
A la cripto le gustan las sorpresas, pero en este fin de año, el cansancio parece ganar terreno. Paralelamente, incluso los ETF de XRP, tras 30 días positivos, ahora registran salidas de capital. ¿Fatiga estacional o reposicionamiento estratégico? En todo caso, el momento no es casual. Una vez más, la psicología colectiva adelanta a los gráficos.