Las criptomonedas vuelven a complicarse la vida. El bitcoin (BTC) se frena de nuevo y pone en peligro los 114.000 dólares, mientras que el ethereum (ETH) trata de seguir subiendo y supera los 3.600 dólares.
Signo mixto en el resto de las 'altcoins'. Solana (SOL) repunta un 2% en las últimas 24 horas, mientras que tron (TRX) avanza con menos convicción. Por el contrario, tokens como XRP, dogecoin (DOGE), cardano (ADA), hyperliquid (HYPE) o toncoin (TON) ceden con moderación.
Según distintos analistas, el sentimiento del mercado se ha vuelto bastante neutro tras los últimos acontecimientos. El principal factor que está lastrando el optimismo de los inversores es la última ronda de aranceles de Estados Unidos, que entrará en vigor el 7 de agosto si los países afectados no llegan a un acuerdo comercial con Washington.
La semana pasada, el presidente estadounidense Donald Trump anunció cambios en la mayoría de los aranceles "recíprocos" instaurados en abril en el llamado "Día de la Liberación". Algunos de esos cambios contemplaban reducciones tarifarias para países que alcanzaron acuerdos con EEUU, mientras que muchos otros vieron cómo debían enfrentar un arancel más alto pasada la fecha límite.
Uno de los países más afectados ha sido Suiza, cuya tasa ha sido elevada al 39%. Desde el país alpino reconocen que ven difícil un acuerdo antes de que se acabe el plazo y muestran su preocupación por los efectos derivados de este arancel. Por su parte, la Unión Europea ha congelado durante seis meses las contramedidas diseñadas para responder a las tarifas de Trump.
Estos temores a un repunte general de la inflación han tenido su eco en los mercados de criptomonedas. Durante el fin de semana, 1.000 millones de dólares en posiciones largas de bitcoin (es decir, que apostaban por precios más altos) fueron liquidadas.
De igual modo, los fondos cotizados (ETF, por sus siglas en inglés) de BTC encadenan tres días de salidas netas, reflejando tanto una toma de beneficios como la cautela con la que el capital institucional se está aproximando a este mercado tras los últimos acontecimientos. Los ETF de ETH también han entrado en terreno negativo tras casi un mes de flujos positivos, con más de 460 millones de dólares saliendo de esta clase de productos de inversión.
Asimismo, algunos expertos se preguntan si la "temporada de 'altcoins'" se ha acabado después de la caída del 20% de SOL o los pocos avances de XRP y otras criptos, a medida que los inversores deciden invertir en activos más seguros.
En el frente macroeconómico también hay cierta preocupación tras los malos datos de empleo conocidos el pasado viernes en Estados Unidos. Paralelamente, la inflación PCE, el indicador favorito de la Reserva Federal (Fed) se mantuvo en el 2,8% en su tasa subyacente en junio y subió en su tasa general al 2,6%. Hoy se conocerá el PMI servicios de ISM y la próxima semana, el IPC de julio. Si ambas referencias decepcionan, los activos digitales podrían verse todavía más presionados.
Sin embargo, no todos los analistas están adoptando una visión bajista. QCP Capital señaló en un informe este lunes que la estructura general del mercado sigue siendo alcista. "La reciente caída parece más una corrección que una capitulación", afirman estos estrategas.
Para estos expertos, un movimiento del bitcoin por encima de los 115,000 dólares, combinado con un repunte en las entradas a los ETF y una compresión de la volatilidad implícita, podría cambiar rápidamente el sentimiento del mercado.
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