Después de sufrir un golpe significativo debido a la caída del exchange FTX, la criptomoneda solana (SOL), ha logrado recuperarse. En 2023, SOL expermientó un aumento de precio cercano al 1.000%.
La criptomoneda comenzó el 2023 con una cotización de 12 dólares y, para los primeros días de enero de 2024, ya tiene un precio 114 dólares.
Hay que tomar en cuenta, que, durante 2021 y 2022, SOL se encontraba entre las criptomonedas más respaldadas por el exchange FTC, lo que generó expectativas y una gran promoción en torno a su potencial.
La trayectoria de SOL ha sido sumamente volátil, especialmente tras la quiebra de FTX en 2022, una situación que puso en duda la estabilidad de este criptoactivo y generó un período de bajos niveles de confianza en la red.
Sin embargo, ha habido una recuperación de SOL impulsada por 4 factores clave: airdrops, memecoins, capital institucional y crecimiento de las finanzas descentralizadas (DeFi) en Solana.
Airdrops estratégicos
Uno de los elementos cruciales en la revitalización de Solana ha sido la implementación de airdrops estratégicos. Estas distribuciones gratuitas de tokens han incentivado la participación y el interés en la comunidad, generando un impulso positivo en la adopción de la red y de su criptomoneda nativa.
Un ejemplo de airdrop, fue el realizado por Jito, un protocolo de staking en Solana, con su token JTO. La cantidad de tokens destinados a la entrega de los activos correspondió al 10% del suministro total, es decir 100 millones de JTO.
Otro caso, es el airdrop del token JUP, anunciado el pasado diciembre por Júpiter, un agregador de DeFi basado en Solana. Aunque no se ha hecho el lanzamiento, Meow, pseudónimo del fundador de Júpiter, ya dio a conocer cómo será la distribución de los tokens.
De un total de 4.000 millones de tokens JUP, el 50% de todos los tokens serán destinados a la comunidad de Júpiter. El otro 50% del suministro de tokens será administrado por el equipo de Júpiter de la siguiente manera: el 20% irá a los miembros actuales del equipo, el 20% servirá como reserva estratégica y el 10% restante actuará como provisión de liquidez.
Actualmente, el equipo detrás del proyecto está haciendo pruebas para “aprender abiertamente con todos sobre cómo lanzar un token en cadena que alinee las necesidades de los destinatarios del airdrop, lo que definirá cuando será la fecha aproximada de lanzamiento”.
El agregador Júpiter procesa 191 millones de dólares en transacciones, ubicándose en el décimo puesto de exchanges descentralizados con mayor volumen de operaciones. Muchos se suman a las filas de usuarios de Jupiter con el fin de ser elegibles para el airdrop.
Memecoins en Solana
Las memecoins han desempeñado un papel fundamental en el resurgimiento de Solana. La tendencia de este tipo de tokens ha atraído a una base de usuarios más amplia y, como consecuencia, ha aumentado la visibilidad de la criptomoneda SOL en el mercado.
Entre las memecoins que más han llamado la atención está Bonk (BONK), un activo que habita en dicha red y que fue lanzado a inicios del año pasado.
Cada unidad de este activo cotiza a 0,00001450 dólares. En 2023 tuvo un incremento de precio que alcanzó 1.280%, como se puede ver en el siguiente gráfico de TradingView.
Aunque BONK tuvo una tendencia bajista desde enero hasta finales de octubre, al llegar los meses de noviembre y diciembre su precio se disparó y comenzó a marcar nuevos máximos históricos.
Crecimiento de inversiones institucionales
La entrada de capital institucional ha sido otro pilar fundamental para Solana. La confianza de inversionistas ha brindado estabilidad financiera y credibilidad al activo digital, generando un efecto positivo en su cotización y consolidación en el mercado.
De acuerdo a datos de CoinShares, SOL continúa siendo la altcoin preferida de los inversionistas. Solo en la segunda semana de diciembre registró una de las mayores entradas con un total de 10 millones de dólares.
Con respecto al futuro de Solana, VanEck, la empresa de gestión de activos solicitante de un ETF de bitcoin (BTC) spot en Estados Unidos, cree tiene potencial para valer cuatro cifras en los próximos 7 años, como lo reportó CriptoNoticias. Según la empresa, para 2030, proyecta un precio de SOL que oscilará del rango bajista de USD 9,81 al alcista de USD 3.211,28.
La proyección de VanEck se sostiene en la posibilidad que tiene la red de convertirse en la primera en alojar una aplicación que tenga más de 100 millones de usuarios.
Las DeFi impulsan a Solana
El crecimiento del ecosistema DeFi en la red de Solana ha sido un factor determinante en su recuperación. La expansión de aplicaciones y servicios DeFi ha atraído a usuarios y desarrolladores, fortaleciendo la utilidad y relevancia de Solana.
El valor total bloqueado (TVL) de las aplicaciones descentralizadas en la red también le dieron vida a Solana, aumentando de 300 millones a 1.500 millones de dólares en el último trimestre, como se puede observar en el siguiente gráfico de DeFiLlama.
La posición de Solana como una red de capa 1 asequible y funcional impulsa su ascenso. Con Ethereum enfrentando elevados costos en su capa base, Solana se destaca como una opción atractiva tanto para los usuarios como para los inversionistas.
Un factor adicional que reaviva a Solana, está su expansión en Brasil y el resto de Latinoamérica con “Superteam”. De esta manera pretende impulsar las áreas de tokenización, arte e inteligencia artificial en la región. Para ello, la Fundación Solana tiene previsto invertir 50 millones de reales, lo que es equivalente a 10 millones de dólares en 2024, dice un comunicado.
En conjunto, estos factores han propiciado una notoria recuperación de Solana, llevándola fuera de la «terapia intensiva» financiera en medio de los desafíos del mercado.