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En una entrevista reciente, el CEO de Ripple, Brad Garlinghouse, reveló que el 95% de los clientes de la empresa no son de Estados Unidos.
A pesar de esto, Garlinghouse enfatizó que Ripple continúa operando en los sectores de pagos y valores dentro de los Estados Unidos. También expresó optimismo sobre un crecimiento significativo en el mercado estadounidense tras la decisión de la Comisión de Bolsa y Valores de retirar su demanda.
Estados Unidos sigue siendo un mercado objetivo clave para Ripple
Garlinghouse recientemente reiteró que el 95% de la base de clientes de Ripple está fuera de los Estados Unidos. Esto no es del todo sorprendente, dado los significativos obstáculos legales que Ripple ha enfrentado en EE. UU. a lo largo de los años, particularmente la demanda de la Comisión de Bolsa y Valores que comenzó en diciembre de 2020.
Ripple ha resuelto oficialmente su batalla legal con la Comisión de Bolsa y Valores de Estados Unidos (SEC). La SEC devolvió una multa de 75 millones de dólares impuesta anteriormente, y Ripple es libre de vender su token XRP a inversores institucionales.
“Esto es todo. El momento que hemos estado esperando. La SEC retirará su apelación, una victoria rotunda para Ripple, para las criptomonedas, de cualquier manera que lo mires. El futuro es brillante, construyamos,” compartió Garlinghouse en una publicación la semana pasada.
Garlinghouse también subrayó el compromiso continuo de Ripple con el mercado estadounidense, con el objetivo de unir las finanzas tradicionales y la tecnología blockchain. Con la batalla legal de la SEC resuelta, Ripple está preparado para un fuerte crecimiento en los Estados Unidos.
Impacto y Perspectivas Futuras de Ripple
El retiro de la SEC libera a Ripple de la presión legal y desbloquea oportunidades para centrarse en el mercado estadounidense.
Con la mayoría de sus clientes actuales basados fuera de los Estados Unidos, Ripple tiene el potencial de aumentar su clientela estadounidense, diversificar su base de clientes y reducir la dependencia de los mercados internacionales.
Garlinghouse también expresó grandes esperanzas en las órdenes ejecutivas relacionadas con criptomonedas bajo el presidente Donald Trump.
Desde que comenzó su segundo mandato en enero de 2025, Trump ha impulsado políticas que apoyan las criptomonedas, incluyendo el establecimiento de un Crypto Council. Según se informa, Garlinghouse está en conversaciones para unirse a este consejo.
Además, como informó anteriormente BeInCrypto, la Oficina del Contralor de la Moneda (OCC) ha permitido a los bancos nacionales y asociaciones de ahorro federales en los Estados Unidos ofrecer servicios de custodia de criptomonedas y stablecoins sin aprobación previa.
Esto marca un paso significativo hacia adelante, especialmente después de que políticas restrictivas como la Operación Choke Point 2.0 enfrentaran críticas.
Garlinghouse también señaló que las instituciones financieras estadounidenses se están volviendo más abiertas a la tecnología de criptomonedas.
Con la nueva guía de la OCC, los bancos pueden asociarse con Ripple para aprovechar XRP en transacciones transfronterizas o custodia de activos digitales, presentando oportunidades sustanciales para la empresa.
A pesar de los desarrollos positivos, Ripple aún enfrenta desafíos. La empresa debe competir con stablecoins dominantes como USDT y USDC, que actualmente lideran el mercado de pagos. Además, aunque la SEC ha retrocedido, el marco regulatorio en los Estados Unidos aún sigue siendo incierto.
Con las barreras legales superadas y las regulaciones cambiando, Ripple está bien posicionada para capitalizar las oportunidades emergentes y fortalecer su posición en el mercado estadounidense.