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En medio de un mercado de criptomonedas en plena tendencia alcista, los mineros de una red en particular gozan de ganancias que sobresalen por encima de la media. Hablamos de los mineros de Kaspa (KAS), cuya rentabilidad se ubica entre los 100 y 200 dólares diarios, dependiendo del equipo y de los costos de electricidad.
El principal factor que influye en esta «tormenta perfecta» para la minería de Kaspa es la apreciación de su criptomoneda. KAS tuvo un crecimiento del 77% en un mes. Pero no es nada nuevo; la criptomoneda acumula un aumento del 1.216% en 12 meses y de 93.000% desde su lanzamiento en julio de 2022.
Con esos números, aportar hashrate a su red se volvió muy rentable. Si se usa el minero más potente de Kaspa, el ASIC KAS Miner KS5 Pro de Bitmain (21 TH/s y 3.150 W), se pueden obtener ganancias de USD 227 por día. Eso sí, se trata de un equipo caro, cuyo precio es de USD 31.479 al momento de redactarse este artículo.
Si nos movemos a un minero más barato, el KAS Miner KS3 (8,2 TH/s y 3.050 W), la rentabilidad desciende a USD 92 diarios, un número para nada despreciable. Otros equipos, como el IceRiver KAS KS3, arrojan ganancias similares. Estas cifras representan un aumento del 33% con respecto a mediados de enero, cuando se obtenían unos USD 69 diarios con los mismos equipos.
Cabe destacar que en todos los cálculos se toma un costo de USD 0,1/kWh para la electricidad, aunque la tarifa puede variar según el país y, desde luego, afectar la rentabilidad de los mineros.
El hashrate de Kaspa también se multiplicó
En el lapso de un año, el hashrate de Kaspa (es decir, el poder de cómputo de todos sus mineros juntos) subió un 23.328%. La cifra fue de 0,7 petahashes por segundo (PH/s) a 164 PH/s.
Como se ha explicado en CriptoNoticias, mucho tuvo que ver el lanzamiento de equipos mineros específicos (ASIC, por sus siglas en inglés) para la red, que previamente se minaba solo con tarjetas gráficas (GPU) de menor potencia.
Eso explica el crecimiento que la red ha experimentado en tan poco tiempo, tanto a nivel de mercado como en infraestructura minera. Kaspa, que surge como una red descentralizada, de código abierto y con confirmaciones instantáneas de transacciones, suma adeptos y ha alcanzado una capitalización de mercado que, con la subida de la cotización de KAS, superó los USD 4.000 millones.