decrypt.co
Un brillante orbe plateado te deslumbra fuera de una estación de metro en el centro de Santiago. ¿Qué haces? Formar una fila, aparentemente.
Según Worldcoin, más de 200.000 chilenos han escaneado sus globos oculares mediante sus controvertidos Orbs. Para los amantes de la privacidad, este es el siguiente paso en el inevitable futuro distópico que nos espera. Pero para otros, es solo un poco de dinero gratis.
Carlos Santibañez, un chileno de 29 años de un pequeño pueblo del sur llamado Llanquihue, le dijo a Decrypt que escaneó sus globos oculares en septiembre de 2022 principalmente por curiosidad. En ese momento, el token WLD no tenía valor monetario. Sin embargo, desde entonces ha ganado más de $150 dólares y continúa recibiendo tokens WLD.
Señaló algo que a menudo pasa desapercibido por los críticos de Worldcoin. "Después de leer un poco, descubrí que su recopilación de datos es menos invasiva que la de otras compañías", dijo. "Esto me hizo pensar: 'Bueno, al menos estoy obteniendo algo de esta información'".
Santibañez también señaló a los inversores de renombre que respaldan a Worldcoin como garantes en la dirección del proyecto. "Al ver que Worldcoin era un proyecto tan grande", dijo, "no quería quedarme fuera".
En el momento de escribir esto, escanear tus ojos te hace ganar 25 tokens WLD, que valen aproximadamente $42, según Coingecko.
Eso es una buena cantidad de dinero en algunos países, como Chile. El país más largo del mundo tiene un salario mínimo de $512 dólares (o $460.000 pesos chilenos). Recibir el 8% de su salario mensual simplemente por escanear sus ojos podría ser demasiado bueno para dejarlo pasar.
Worldcoin ha tenido éxito en economías emergentes que tienen cifras similares a las de Chile. Según la empresa, Argentina, un país devastado por altas tasas de inflación, experimentó durante un día en agosto una inscripción cada nueve segundos.
Al otro lado del Atlántico, en África, Kenia también presenció filas asombrosamente largas, con los medios locales informando más de 350.000 registros. Esas cifras no son del todo sorprendentes en un país donde el salario mínimo apenas supera los $100 dólares al mes.
Las autoridades kenianas han prohibido las operaciones de Worldcoin, citando preocupaciones sobre la privacidad.
De vuelta en Chile, otros simplemente se están inscribiendo por la novedad.
Un estudiante chileno de 25 años, Javier Santelices, explicó a Decrypt que a pesar de ser escéptico con las criptomonedas, pasó por un puesto y decidió probarlo. "Nunca he entendido realmente las criptomonedas", dijo. "Estaban regalando dinero, así que ¿por qué no?"
Está de acuerdo con Santibañez en cuanto a que las personas ya están siendo objeto de recopilación de datos de forma encubierta por parte de otras empresas. "Esto no es diferente a lo que hacen todos los demás en Internet", dijo.
El controvertido proyecto Worldcoin no ha enfrentado una oposición regulatoria generalizada en Chile, a pesar de las impresionantes cifras que la empresa afirma que ya se han registrado. El país se ha hecho conocido por su libertad económica y su floreciente escena tecnológica. También se encuentra a la vanguardia de la IA en la región, ocupando el primer lugar en el Índice Latinoamericano de Inteligencia Artificial (ILIA).
Sin embargo, el hecho de que el 1% de la población se haya registrado en Worldcoin ha dejado a algunos sorprendidos.
"Me resulta curioso que el público juzgue al mundo de las criptomonedas como una estafa, solo para luego hacer largas filas por un poco de 'dinero gratis'", dijo Francisco Díaz, un antropólogo chileno que estudia las DAOs, a Decrypt.
Díaz ha estado participando activamente en talentDAO, un colectivo de investigación sobre cómo funcionan este tipo de organizaciones desde hace más de dos años. Le contó a Decrypt cómo han evolucionado los DAO, dejando atrás la "vieja fórmula" de emitir un token de gobernanza sin siquiera considerar su necesidad.
En referencia a su propio país, Díaz piensa que el éxito de Worldcoin se debe "probablemente al incentivo económico". Y considerando el salario mínimo del país, concluyó: "No es una pequeña cantidad de dinero".