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El token emitido por la plataforma de criptomonedas en quiebra FTX se ha disparado un 32% hoy, después de que su nuevo CEO, John J. Ray III, reiterara que está considerando la idea de volver a poner en marcha la plataforma, anteriormente dirigida por Sam Bankman-Fried.
Ray declaró el jueves que sigue intentando descubrir y recuperar activos de FTX y que ha encargado a un grupo que estudie la posibilidad de volver a poner en marcha la rama internacional de la bolsa, según informó el Wall Street Journal.
"Hay partes interesadas con las que estamos trabajando y que han identificado lo que consideran un negocio viable", dijo Ray.
Pero no es la primera vez que se dice que FTX podría estar reiniciándose. La semana pasada, los abogados del comité de acreedores de FTX dijeron que hacer públicos los nombres de los 9 millones de clientes de la bolsa podría perjudicar un "posible reinicio".
FTX se hundió en noviembre tras una corrida bancaria en la bolsa que obligó a la empresa a admitir que no mantenía reservas uno a uno de los activos de los clientes. El agujero significaba que la bolsa no podía satisfacer las demandas de retiros de los clientes. Finalmente, FTX congeló los retiros y se declaró en quiebra. Desde entonces, la fiscalía estadounidense ha acusado a Bankman-Fried de ocho delitos financieros relacionados con la quiebra de FTX. El ex CEO se encuentra ahora bajo arresto domiciliario y a la espera de un juicio previsto para octubre.
La subida de hoy de FTT a aproximadamente 2,37 dólares supone un incremento sustancial del 165% desde su mínimo histórico de 0,82 dólares el 30 de diciembre, según datos de CoinGecko. A pesar del colapso total de FTX, el token nunca ha llegado a cero.
FTX emitió tokens FTT y los vendió como una forma de que los traders de su bolsa obtuvieran descuentos en las comisiones, no muy diferente del token BNB de Binance. FTX también utilizó tokens FTT para adquirir activos y empresas que deseaba, como la empresa ahora extinta Blockfolio, que FTX pagó casi en su totalidad con tokens FTT que la propia empresa emitió.
Aunque no está claro por qué los traders siguen comprando y vendiendo un token de una empresa de intercambio desaparecida, es posible que vean una oportunidad de beneficiarse de la volatilidad salvaje del token. También es probable que algunos estén especulando con la posibilidad de que el FTT recupere su utilidad en el futuro.
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